Murió el tirano sin ser juzgado, en 1975. Y murió el torturador condecorado, en 2020. Qué frágil es la memoria. Imagen, Pixabay.com Dices que mi poesía no tiene personajes, que el viento o el sueño no hablan ni sienten. Pero ellos son más reales que el agente de Bolsa, el sicario a sueldo del... Leer más →